Cuidado de los animales
¿Te interesa la ciencia? La ciencia es algo que gusta a casi todo el mundo. Pero a veces ni siquiera sabes que te interesa la ciencia. A mí siempre me han interesado los animales. Los animales siempre han sido todo mi mundo, y cada vez que les decía a mis padres que quería tener un animal en casa, mis padres siempre me lo prohibían completamente y me decían que no podían tener un animal en casa. Decían que mis padres trabajaban mucho. Lo comprendo. Sé que mis padres trabajaban mucho, pero eso no significa que yo no pudiera tener un animal en casa. Cuando tenía once años, deseaba tener un perro o un gato, o al menos un conejo enano, porque leía muchos libros y enciclopedias sobre cómo cuidar a los animales.
Sobre todo para un gato o un perro y también para un conejo enano. Pero mis padres no querían dejarme hacerlo de todas formas, y lo justificaban todo diciendo que sabían que ellos mismos cuidarían del animal de todas formas. Pero yo creo que no, si realmente quisiera un animal durante tantos años, durante tanto tiempo, creo que me haría cargo de él. Por supuesto, al no haber tenido un animal en ese momento, no tenía ni idea de que en realidad me preocupaba bastante.
Pero más tarde, cuando fui adulta y me interesé por el estudio y también por la ciencia, me di cuenta de que en realidad cuidar de un animal es bastante complicado, no es tan fácil. No se trata sólo de conseguir un animal y alimentarlo, sino que también hay que adiestrarlo. Mimarlo y darle todo el cariño que un animal necesita. Mucha gente pensará que es un conejo normal, pero incluso un conejo normal necesita cuidados. Que lo acaricien, quizá. Y por eso les dije a mis padres que lamentaba haber sido antes una niña pequeña y no saber lo que supone cuidar de un animal. ¿Y qué tipo de animal te hubiera gustado tener cuando eras pequeña? ¿O preferías estudiar?